El concepto epistémico de paya retestiná: o de cómo “Carmen y Lola” pisotea a las mujeres gitanas e invisibiliza nuestras luchas

«Frente a la colonialidad y el No Ser, propongo, pues, la negación a hablar desde donde es impuesto: cambiar los términos y desarticular los conceptos existentes y practicar la enunciación desde el mismo lugar donde se impone el silencio y con la voz de las y los silenciados, in sha’a Allah.»

Sirin Adlbi Sibai. La cárcel del feminismo. Hacia un pensamiento islámico decolonial

Carmen y Lola, dirigida por Arantxa Echevarría, ha empezado a sonar fuerte desde que se anunció su selección en la Quincena de Realizadores de Cannes, pero su guión ya recibió una mención de honor en los premios Julio Alejandro que organiza la SGAE. Hasta el momento solo hemos podido ver el tráiler que circula por las redes enlazado a una entrevista con la autora http://www.publico.es/culturas/arantxa-echevarria-mujer-gitana-pisoteada-aplastada-invisible-payos-gitanos.html

No sé que me cabrea más si el tráiler o la entrevista.

La ira está muy mal vista, lo sé, tiene muy mala fama, pero es un instrumento de cambio al que no me queda mas remedio que recurrir en esta ocasión.

Arantxa, perdón por la confianza, dice que ha hecho la película como un método de activismo y visibilidad. Arantxa es paya y dice ser feminista, por ello, comenta que hace la película para contar la grave situación en la que se encuentran ¡nos encontramos! las mujeres gitanas. Dice que no tenemos voz, que no ha encontrado ninguna, repito, ninguna gitana lesbiana que se declare públicamente como tal ¡Que mal ha hecho Arantxa su trabajo de documentación! Y mira que lo tenía fácil: con una simple búsqueda en Google hubiera obtenido 133.000 resultados en 0,18 segundos ¡Lo que chanela el payo Google! Pero es que además, en España hay desde hace años un movimiento asociativo gitano lo suficientemente potente como para albergar a la Asociación Gitanas Feministas por la Diversidad (https://www.gitanasfeministas.org/) o a la Asociación Ververipen, Rroms por la Diversidad (https://www.facebook.com/Ververipen/). No obstante, si tenía algún reparo a recurrir  a fuentes directas, podía incluso haber acudido a organizaciones tan conocidas como la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Trans y Bisexuales en cuya ejecutiva también participan personas gitanas.

Arantxa ¡tan echá p’alante ella! dice que su película es novedosa. ¡Ay, marquesa, que mal te funciona el servicio! Alba Flores, actriz gitana, recibió el premio a la visibilidad lésbica 2017 en Andalesgai (Festival Internacional de Cine lésbico, gay, bisexual y trans de Andalucía) precisamente por su interpretación del personaje Saray Vargas, gitana lesbiana, en la serie televisiva Vis a vis producida por Globomedia y FOX Networks Groups España para Atresmedia y posteriormente para FOX España y emitida desde 2015 tanto en Antena 3 y en FOX. Ya van a por la cuarta temporada, Arantxa, a ver si te enteras, reina.

Arantxa no innova nada, nada, nada en su película. Por lo que se ve en su tráiler y ella misma ha explicado, simplemente ha reproducido el conjunto de estereotipos y clichés que desde el siglo XVII ¡Gracias Miguel de Cervantes! ha convertido a la gitana en un ser lleno de picardía, hechicera, ladrona e hipersexualizada. Así es tu gitana, Arantxa. Crear a una gitana tópica y estereotípica es fácil. Esa gitana de la copla, vuestra gitana, la lleváis creando desde tiempos inmemoriales y la cambiáis y moldeáis a vuestro antojo: antes con la navaja en la liga dispuesta a la puñalá trapera y, ahora, agobiada de tradiciones ancestrales de las que nos tenéis que salvar. Hace tanto tiempo de la creación de vuestras gitanas imaginarias que ya no sabéis cómo es una gitana de verdad, real. Querida Arantxa, yo no soy tu gitana y tampoco innovo. Lo de yo no soy tu gitana lo he tomado de James Baldwin en el muy didáctico y recomendable documental I AM NOT YOUR NEGRO, ( https://www.youtube.com/watch?v=ufVpHAUmY9E).

Yo no soy tu gitana ni ninguna lo somos.

Arantxa, deberías catalogar tu película dentro del género de ciencia ficción fantástica, en cambio te has atrevido a calificarla como innovadora y como un método de activismo feminista antirracista progitano y te diré, Arantxa, que tu tráiler, al igual que tu entrevista, huele y sabe a creación paya retestiná que es todo lo contrario.

No te confundas, Arantxita, no, no quiero insultarte, solo deseo explicarte el significado epistemológico, es decir, de sistema de pensamiento o ideología que subyace al termino “paya retestiná” que en este caso, es sobre todo, una descripción tuya y de tu trabajo.

Una paya retestiná, Arantxa, es alguien que tiene la mirada turbia, sucia y esa turbiedad viene de sí misma, de cómo ha construido su propio pensamiento, por supuesto payocéntrico, es decir que cree y practica la intolerancia con las demás culturas que la rodean, creyendo que la suya es la que más mola, es decir, situándose en el puto centro del universo, y estableciendo a partir de ahí las categorías en las que nos encaja al resto de las mortales.

Esa payitud extrema, ese rancio etnocentrismo que derrochas, es lo que te lleva, Arantxa, a afirmar que “O cuenta una paya la situación de la mujer gitana o no la cuenta nadie. Y desgraciadamente tiene que ser una paya porque ellos no tienen voz”. Sí, hija, sí, por desgracia ha sido una paya retestiná quien haya tenido que venir nuevamente a salvarnos.

En 2009 había gitanas lesbianas que se mostraban en público en el programa de Quintero.

Una paya retestiná es alguien que tiene la poca vergüenza de pensar que sabe más de las gitanas que las propias gitanas.

Ante la pregunta “¿Cómo son los jóvenes gitanos de hoy?” respondes con toda soltura, sin lache ninguna -Arantxa, por cierto, demuestras que has escuchado muy bien a los actores gitanos de tu reparto (nótese el modo ironía) cuando intentas reproducir una palabra en caló y lo haces mal-: «Los jóvenes gitanos de hoy van hacia atrás. Van de Dolce&Gabbana y para ellos lo más importante es tener un buen móvil y que su novia sea la más guapa. No tienen nada de la profundidad de la cultura gitana.» Claro, reina, tú sí que conoces bien la cultura gitana. Las gitanas de verdad no. Y dime ¿El diploma de gitanóloga te lo ha dado Diana Gil, directora de la Cátedra de Cultura Gitana de la Universidad Alicante que es tan paya retestiná y tan ignorante de nuestra cultura como tú?

Es necesario nombrarla por su nombre y apellido para que quienes nos lean no vayan a creer que nos inventamos las cosas: sí, sí, en la Universidad de Alicante se ha creado una Cátedra de Cultura Gitana y Diana Gil, paya y sin ningún conocimiento académico ni experiencia profesional en el ámbito de la cultura gitana, ha sido nombrada su directora.

Llamo vuestra atención sobre este hecho, hermanas lectoras, porque nadie más os lo va a contar y si seguimos en silencio estas payas retestinás en versión usurpadoras se nos van a comer.

Casi siento que me estoy disculpando, y es que este puto sistema Antigitano y Patriarcal hace de la culpabilidad una virtud en nosotras las mujeres ¿os suena?

Una paya retestiná es además, Arantxa mía, alguien que se cree que no es racista y se engaña a sí misma y a las demás para que creamos que nos tiene que salvar la vida. En el feminismo que yo practico a eso se le llama paternalismo.

Y resulta que tu guión ya obtuvo premios y que tu película se va a estrenar dentro del Festival de Cannes (bueno, bueno, en una sección paralela) cuando, visto tu tráiler, mejor encajaría como capítulo de los Gipsy Kings de Cuatro. Habla con el payo Jacobo Eireos, director de ese bodrio antigitano, seguro que tiene algo pa’ ti. Entre jambos retestinaos os entendéis. Seguro. Él también anuncia que esta temporada va a emitir una boda gay ¡hasta con prueba del pañuelo!

No voy a excusarme ni a defender que somos diversas https://politica.elpais.com/politica/2018/04/08/diario_de_espana/1523196827_109624.html , si veo la necesidad de este artículo es para aportar y crear una lucecita crítica a las mentes y miradas limpias de mis hermanas feministas que pueden ver el tráiler ahora, y la película después, y confundir feminismo gitano con paternalismo antigitano de un paya retestiná

No, no somos ni vuestras gitanas ni vuestros gitanos. Hacéroslo mirar. Tenéis un problema de retestinación que, espero, no acabe resolviéndose en unas malas cagaleras durante las cuales el agua os pille bien lejos.

Silvia Agüero Fernández