Ya conoceréis el despropósito y la polémica que ha generado la empresaria y modelo afrocolombiana Belky Arizala, por eso no me extenderé mucho. La creadora del concurso de belleza «Señorita Afrodesendiente», lo convirtió este edición en una parodia de su propia esencia, permitiendo que cualquier persona, sea cual sea su condición étnica, pudiera presentarse al mismo. De hecho, la ganadora ha sido una mujer blanca oriunda de Cartagena.
Ante la magnitud de estos hechos, que la empresaria Belky sigue relativizando, e incluso, se permite el lujo de insultar a quien la ataca, acusándoles de atrasados (no han evolucionado como ella) o resentidos (odian a los blancos), no hay perdón posible. Las excusas posteriores de la empresaria, unidas a un discurso supuestamente humanista e inclusivo, hablando de paz y concordia entre todos, suenan a falso y artificial. La razón verdadera es sin duda que así tiene más patrocinadores. Se trata del dinero.
Pero no puedo por menos que escribir estas lineas, que me salen del corazón cuando veo a la ganadora blanca del concurso recitar el poema «Rotúndamente Negra» de mi adorada Shirley Campbell Barr.
La empresaria Belky Arizala, unió su propio ridículo a la humillación de este acto. La niña ganadora (que eso es lo que es) no tiene culpa de nada. Fue inducida a ponerse delante de un espejo, y con su piel clara y sus labios finos, recitar un poema que es símbolo para millones de mujeres negras que hablan español. Ella no sabía que estaba haciendo, y nada tengo contra ella. Pero la empresaria afrocolombiana si que sabía lo que hacía y por eso merece mis más absoluto rechazo.
¿Como es posible que una mujer negra como ella, que ha sufrido es sus carnes el rechazo constante de sus rasgos físicos, que ha vivido en este mundo que la niega, la ofende, la ignora y la invisibiliza, no midiera las consecuencias del atentado moral que estaba perpetrando?
Amigas estamos hablando de Colombia, estamos hablando de Latinoamerica y el mundo de habla hispana, donde hoy tener piel negra es sinónimo de ser discriminado. Porque esa sociedad que te rodea ni te considera, ni te acepta. Esa sociedad, todavía hoy te pone mil barreras por el color de tu piel. Como Belky Arizala no pudo darse cuenta de eso.
Como no pudo darse cuenta de que en su país, Colombia, muchas niñas y adolescentes negras, se saben de memoria ese poema, porque es suyo, porque está escrito para ellas, porque las representa solo a ellas, en un mundo donde todo está hecho a la medida de los otros.
Dicen que Shirley Campbell se ha molestado por la utilización de su poema sin su permiso, y además de esta manera. Shirley es la autora y tiene derecho a recibir sus derechos de autor, como corresponde, aunque creo que no le agradarán nada su origen. Pero también se que Shirley Campbell es consciente de que esas palabras ya no son solo suyas. Ella sabe que es de todas las mujeres negras, y que no hay nada que pague semejante insulto y humillación.
Cuando leí ese poema por primera vez, cambió mi vida y transformó la percepción que tenía de mi misma. Se que es lo que vivieron muchas mujeres afro como yo. Ese es el valor inmenso de «Rotúndamente Negra», algo que no cuesta dinero, pero que es de un valor incalculable. Nos ha unido, nos ha hecho creer y nos ha dicho: ¡¡¡eres bella, eres válida, eres negra… siéntete orgullosa!!!
Belky Arizala puede vestir sus actos de bellas palabras. Incluso ahora puede hacerse la víctima ¿Acaso creías que semejante insulto no tendría consecuencias?
Elvira Swartch Lorenzo
Colaboradora habitual en Afroféminas. He trabajado de todo. Hija de migrantes afrocolombianos.
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