No soy de color, soy negra, y ante todo mujer
Porque yo toda negra, caminando en un país de «blancos», logre sentirme desdichada, logré sentirme avergonzada, y agaché la cabeza, dudé, dudé mucho en levantarla, pero un día, así como hoy, después de preguntarme: Negra, si hubieras podido escoger tu color de piel ¿cuál hubiese sido?
Pero, ¿por qué me avergonzaba?, ¿por qué avergonzarme de mi historia? ¿Por qué intentaba culparme de una historia mal contada?, y sentí ese poder negro en mi sangre, que me recorría, que me decía Luz Darly, no agaches más la cabeza, grita, grita, se libre; eres negra y siempre lo serás, y aunque los dudes, no olvides que tu color de piel no destiñe.
Y lo intenté, lo intenté una y otra vez, lo juro, lo intenté; pero ¿por qué hacerlo? Sí, estaba avergonzada, y me preguntaba una y otra vez ¿cómo hacen mis pais...