El nuevo Parlamento Europeo carece de diversidad según evidencian los datos. Unos 37 de los 720 eurodiputados recién elegidos tienen un origen diverso, es decir, casi la misma cifra que en 2019, cuando se celebraron las anteriores elecciones europeas.
Nos fijamos en los legisladores que nacieron en un país fuera de la UE o en los que uno de sus padres era extranjero, o bien en aquellos que representan a una minoría, como los húngaros étnicos de Rumanía.
En el mandato 2019 – 2024, el Reino Unido (que abandonó la Unión Europea en 2020) eligió el mayor número de eurodiputados de minorías étnicas (siete de 73 escaños), seguido de Francia (seis de 79 escaños).
En las elecciones europeas de junio de 2024, Francia eligió a los eurodiputados más ‘diversos’ (diez de 81), seguida de Suecia (cinco de 21). Alemania y Rumanía votaron cada una a tres legisladores con un origen diferente.
Es necesaria una mayor inclusión
Un portavoz de la Red Europea contra el Racismo (ENAR) declaró que la falta de representación significativa en el Parlamento «refuerza nuestras conclusiones de que esta institución no refleja la diversidad de la población europea. Esta tendencia pone de relieve la necesidad urgente de una mayor inclusión y representación en las estructuras políticas de la UE.»
Ya en 2019, ENAR dijo que mientras que las minorías raciales y étnicas representan al menos el 10% de la población de la Unión Europea, representaban alrededor del 36 (5%) del número total de 751 eurodiputados electos. Esta cifra se redujo al 4% tras la salida del Reino Unido del bloque.
Bruselas -sede del Parlamento de la UE- es una de las zonas con mayor diversidad étnica del mundo, con unas 184 nacionalidades diferentes representadas.
Partidos responsables de una mejor representación
Entre los legisladores franceses figura Arash Saeidi (GUE/NGL), nacido en Irán. Saeidi, elegido en nombre del partido de izquierdas La Francia Insumisa, dijo que «no le sorprenden» las cifras porque las elecciones europeas se celebran a nivel nacional, donde el panorama es similar.
«Francia no está entre los peores países, pero es responsabilidad de los partidos nacionales asegurarse de que haya una mejor representación», dijo.
Francia también cuenta entre sus eurodiputados con tres legisladores de Reunión y Guadalupe, sus departamentos de ultramar. Países como Holanda, que también cuenta con territorios de este tipo, no tiene ningún legislador de la parte caribeña de su Reino en la delegación.
La legisladora Rima Hassan (GUE/NGL), francesa y palestina, fue elegida en junio y anteriormente trabajó como abogada y activista de derechos humanos.
Un racismo sistémico
Según Hassan, «la infrarrepresentación política de los ciudadanos europeos racializados debe preocuparnos, ya que refleja las consecuencias -entre otras muchas- de un racismo sistémico que llevamos años denunciando, pero que muchos responsables políticos aún se esfuerzan por abordar».
«La lucha contra la discriminación racial debe incluir una mayor proporción de candidatos procedentes de minorías, que son los mejor situados para llevar la cuestión del antirracismo a todos los niveles de la representación política, reforzando así la legitimidad democrática», añadió.
Bélgica es uno de los ocho países que sólo cuenta con un eurodiputado de origen no comunitario: Assita Kanko (ECR), que nació en Burkina Faso. Entró en el Parlamento de la UE en 2019 y fue reelegida en junio. Diez Estados miembros, entre ellos Portugal, Malta e Irlanda, no eligieron a ningún legislador con una etnia diferente.
Esfuerzos por la diversidad en el Parlamento Europeo
En 2021, la mesa del Parlamento -que incluye a su presidenta y vicepresidentes, acordó hacer que la propia administración fuera más diversa. Para alcanzar este objetivo en 2024, la mesa aprobó una hoja de ruta de dos años con ambiciosos hitos en materia de discapacidad, asuntos LGBTIQ+ y diversidad racial y étnica.
Uno de los objetivos en materia de lucha contra el racismo es fomentar la diversidad étnica entre el personal parlamentario. Según un portavoz del Parlamento todos los miembros del personal que se incorporan ahora a las instituciones «reciben amplia información sobre diversidad e inclusión a través de sesiones informativas».
Sin embargo, el problema de la diversidad es va más allá del Parlamento, dijo ENAR en su análisis de los legisladores elegidos en el mandato 2019-2024. «La Comisión Europea tiene una plantilla de más de 33.000 personas y tiene poder real en la elaboración de políticas europeas, y sin embargo no publica datos sobre diversidad racial, ni implementa acciones positivas para mejorar la representación».
En una carta enviada a la Comisión entrante, más de 130 organizaciones de la sociedad civil -entre ellas Amnistía Internacional y Human Rights Watch– pidieron que la igualdad y la no discriminación se incluyeran como prioridades centrales en su trabajo para los próximos cinco años.
Menor presencia femenina
El nuevo Parlamento también registró el mayor descenso porcentual de la representación femenina desde las primeras elecciones directas de 1979. Las mujeres serán el 38,5% de los eurodiputados -277 de 720-, un 2,1% menos que en la anterior legislatura, cuando ocupaban el 46% de los escaños.
Según el servicio de portavocía, el Grupo de Alto Nivel sobre Igualdad de Género y Diversidad de la Eurocámara reanudará su trabajo en la próxima legislatura, «continuando con la aplicación de la integración de la perspectiva de género en las actividades, estructuras y órganos del Parlamento». AGENCIAS
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