Quizá este texto parta de una necesidad personal (política). Mi entorno más cercano e íntimo conoce esta “anécdota” y con el tiempo he podido darle nombre y forma y hoy la comparto, porque quizá tú, quizá otras u otres, hayan podido sentirse así.
El contexto: nací, crecí y vivo en las Islas Canarias, en el estado español y tengo ahora 24 años.
Fue durante mi adolescencia cuando empecé a notar que, además de fijarme en chicos, me fijaba también, y fuertemente, en chicas. Y desde que empecé a notar esa atracción física-emocional hacia otras mujeres, empecé a negármela a mí misma, usando todo tipo de pretextos y “autoconvencimientos” de que esa realidad que estaba viviendo no era así. Quizá hasta aquí pueda parecer (por desgracia) una historia común sobre el descubrimiento de una sexualidad no-normativa de una persona cualquiera. Pero creo que hay un matiz diferente: yo no sólo rechaza sentir eso por otras mujeres por ser yo una mujer, sino por ser negra. Te podrá parecer increíble, pero me parecía imposible que a las mujeres negras les pudieran gustar otras mujeres, o a hombres negros gustarles otros hombres. Podrás pensar que exagero, pero cuando he podido compartir este sentimiento con otras mujeres negras lesbianas/bisexuales entiendo que es un sentimiento común, poco hablado, quizás.
La primera vez que vi a dos hombres negros besándose fue en un vídeo que encontré por remota casualidad, y recuerdo cuánto me chocó aquello, ¿dos hombres negros amandose? ¿deseandose? Imposible. Eso no se veía en la tele. En el Príncipe de Bel-Air los hombres negros eran heterosexuales. Pero… si entonces ellos son negros y se aman, ¿las mujeres negras también nos podemos amar? Imposible, algo debe estar yendo mal.
Y no fue hasta ya entrada en esta juventud que llevo ahora y entrar en el movimiento feminista y antirracista que comprendí lo que pasaba: hay un problema de representatividad, hay una heterosexualidad presupuesta e impuesta sobre las personas negras y racializadas en general y hay una imagen muy clara de lo que es ser LGTB*. Si ya era difícil encontrar referentes negros, encontrarlos siendo sexo-afectivo-disidentes era una odisea, más hace 20-15 años, que no había una normalización como puede haberla ahora en ciertos medios audiovisuales de personajes LGTB* mayoritariamente blancos (aunque aún nos queda mucho por hacer, por supuesto, y podemos hablar sobre la visibilización de las personas trans y mujeres lesbianas/bisexuales, pero eso será en otro capítulo). Yo tenía en mente una idea muy clara sobre lo que era no ser heterosexual. Un hombre blanco joven que ama a otros hombres y mujeres blancas que amaban a otras mujeres. Y no creo que esta idea fuera únicamente mía puesto que he crecido con referentes culturales e imaginarios similares a la gente que me rodea. Todo esto unido a que comúnmente consideramos como ejemplos de aceptación hacia el colectivo LGTB a países occidentales y blancos, crea la imagen de la persona negra (aunque viva/haya nacido en estos países) como ajena a la realidad LGTB que pueda/podamos vivir.
Así que en este texto, además de traerte mi sentir personal-político-colectivo, te traigo algunas referentes lesbi-bi-trans negras.
Audre Lorde
Audre Geraldine Lorde fue una escritora afroamericana, feminista, lesbiana, madre, mujer con cáncer y activista por los derechos civiles. Como poeta es especialmente conocida por su dominio técnico y expresión emocional con los cuales expresa ira e indignación por las injusticias civiles y sociales que observó a lo largo de su vida. Audre es una persona de obligado conocimiento y obligada lectura.
Marsha P Johnson
Marsha P. Johnson fue una mujer trans y activista del movimiento de liberación LGBTQ*. Nacida en Elizabeth, era una veterana de los disturbios de Stonewall y una figura popular en el ambiente LGTB* y artístico de Nueva York de las décadas de 1960 a 1990. Marsha y su compañera de lucha, Sylvia Rivera, fueron las precursoras del dia del Orgullo LGTB* que seguimos reivindicando hoy día. Hay un documental sobre Marsha en Netflix.
Zanele Muholi
Fotógrafa y activista visual, defensora de los derechos del colectivo LGBT en Sudáfrica. Su trabajo intenta representar y visibilizar a la población negra lesbiana y trans en Sudáfrica, representando con crudeza la violencia a la que es sometida el colectivo LGTB negro sudafricano. “Las comunidades negras LGTB en Sudáfrica asistimos a más funerales que fiestas”. Puedes encontrar su obra en la red y en Afroféminas hay un artículo sobre ella.
Aaron Philip
Aaron Philip es una modelo y activista antiguana-estadounidense de Elite Model Management. Activista trans género disidente, antirracista y anticapacitista es una referente necesaria. “Mi objetivo es normalizar la presencia de personas discapacitadas, mujeres / mujeres trans y personas trans no conformes con el género «.
Nina Simone
Eunice Kathleen Waymon, más conocida como Nina Simone fue una cantante, compositora y pianista estadounidense de jazz, blues, rhythm and blues y soul. Nina era bisexual. Gran luchadora por los derechos civiles de las personas afroamericanas, esta lucha queda expresada en muchas ocasiones a través de sus canciones. Simone dejó Estados Unidos en 1969, tras el asesinato de Martin Luther King, hastiada de la segregación racial contra los afroamericanos. También hay un documental sobre ella en Netflix.
Angela Davis
Angela Yvonne Davis es una filósofa, política marxista, lesbiana, activista afroamericana antirracista y feminista y profesora universitaria. Participó en el Partido Panteras Negras y militó en el Partido Comunista de EEUU. Angela es también, de obligada lectura.
Este es un breve, brevísimo acercamiento a mujeres lesbianas/bisexuales/trans negras. Sé que hay una sobre-representación de referentes afroamericanas, me une a ellas una conexión personal porque fueron las primeras que conocí y soy consciente de que obtienen más visibilidad que las mujeres negras africanas. Y sé que faltan hombres negros gays/bisexuales/trans, pero es aposta, y les lanzo la pelota compañeros, en la visibilización de los hombres negros trans, gays y bisexuales. El título de este texto “Las mujeres negras aman a otras mujeres (negras) también” es un título conscientemente elegido que no pretende invisibilizar la realidad de las mujeres negras trans, sino que pretende ser un ejercicio de sororidad negra que trascienda las barreras romántico-sexuales y sea también una demostración de admiración y amor hacia otras mujeres negras lesbianas, bisexuales y trans, que transitamos estos espacios y caminos no-normativos.
Melinda Decker
Soy Canaria. Fisioterapeuta. Activista afrofeminista y antiespecista. Descubriendo mi negritud y en abrazo continuo con mi animalidad.
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No es una critica pero lo que te pasaba al principio era un postura racista, mas claro, una estereotipación. Ahora que conoces tu ser creo que es agradable saber que uno “NO puede convertirse” sino “SOLO SER”. Y por eso mismo el negro no es “culpable” por ser negro como el blanco no tiene “culpa” por ser blanco. Igual en el tema de orientación sexual en lo que te apoyo totalmente. Aunque -discúlpame el machismo- seas una gran perdida para la opción heterosexual 😀 (sryyyyyyyyy)