Pocos lo consideran como Cualquier otro beso, de hecho lo ocultan, puede que lo practiquen pero sin luz, sin reflejos e incluso con miedo.
Se le relega a oscuridad y se piensa que por aquello de que tiene el adjetivo de negro, no se le verá, o se hará invisible, pero no. Ahí sigue, siendo igual de beso que cualquier otro.
Si, ese beso que no te muestran en las películas, ese beso que solo lo relacionan con prácticas de otro tipo de gente (como si lo despreciaran). Estamos acostumbradas, es lo que pasa con todo lo que lleve negro o se acerque un poco a esos matices.
Pero también al poner un túpido velo, y llenarnos de tabúes, podemos tener más cerca momentos de placer, de sentir, de estar cerca de vitalidad del conjunto de sensaciones de nuestra mente y nuestro cuerpo.
Y es que ese beso, es posible en todas las parejas, en todos los cuerpos y… Es que las terminaciones nerviosas a las que llega, a veces parecen inimaginables. ¿Y por qué no? Disfrutemos de cada rincón de nuestro cuerpo, que para eso también es negro y no por ello menos bello.
Por supuesto, la mejor de bellezas no es tener un aspecto físico de un modo u otro, no, la belleza es la higiene desde los sitios más accesibles para besar hasta los menos accesibles, es el valorar nuestras curvas, nuestras arrugas estén donde estén, pero si las cuidamos, nos cuidamos y besamos con más gusto. Y ese beso puede llegar hasta despertar nuestras entrañas.
Porque que sea negro, no implica que sea sucio. O si lo piensas, es que a lo mejor tampoco has saboreado bien otro tipo de besos.
¿Cuál es tu top 3 de besos?
*Para parejas sexuales esporádicas se recomienda usar protección de látex para éste beso. Para toda persona que quiera añadir este beso en su lista de besos se recomienda una buena higiene bucal y anal.

Sara del Arco
Humana, persona y afroespañola. Investigadora de campo y educadora en salud sexual y prevención.Técnica en RRHH e Igualdad. Promotora de @snappolis (IG).

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Hermoso lenguaje, Sara del Arco, y maravillosas sugerencias llenas de pasión y color. Negro el beso más allá de cualquier línea étnica que nos marcara el destino. Negro el beso, con luz o sin ella, desde la fuerza desmesurada de nuestros sentidos y nuestra expresión. En el más «oscuro» de todos los rincones de nuestro cuerpo dormita, como un dragón milenario, ese explosivo indefinible de indefinible sabor… Su sugerente color, que apenas cambia de tono según la variopinta diversidad étnica de cada dama, condensa en su «negrura» toda la fuerza, toda la belleza y toda la dimensión de lo negro que palpita en la sangre y el alma de toda mujer….
¡Muchas gracias y todos los besos negros para ti!