Ayer estaba yo sentada ayer viendo la televisión, «Zapeando» para más señas, tan tranquila pensando en mis cosas. Me río mucho con este programa de la Sexta. Me permite desconectarme de este ambiente de activismo y peleas en redes. Hay que descansar.
Todo iba bien, las bromas de siempre. Hasta que ZAS!!! en toda la boca. Ahí estaban celebrando sus cinco años con una imitación de los Jackson Five con black face incluido. No podía creérmelo.
No es que no hayan metido la pata nunca, no es eso. Pero quizás no de manera tan zafia.
Los miembros de este programa son los típicos cómicos o presentadores que se consideran perfectamente progresistas y muy sensibles a todo tipo de causas sociales. No pierden oportunidad de meterse con los fachillas de turno, afearles sus cositas y esas patochadas que se hacen de cara a la galería y quedan muy bien.
Pero ahí estaban, frente a mis ojos tamaño globo aerostático, bailando a lo Jackson Five con el maquillaje en su cara. ¿No se habrían dado cuenta?
Eso ya no cuela. Estoy segura, porque conozco el tema, que alguno se le pasaría por la cabeza que podría herir a alguien. En los últimos tiempos se ha montado mucho ruido en este país con el tema del black face y es imposible que en todo el equipo del programa a nadie le chirriase esto.
Lo que ha ocurrido es que les ha dado igual, porque han decidido que no es trascendente. Que su diversión es más importante que recordarle a cientos de miles de negros de este país, que la única forma en que pueden salir en su programa es así. Han actuado como esos niños de fraternidad estadounidense que deciden hacer una «fiesta de negros».
Me preocupa que unas personas ante la tesitura de poder ofender a alguien o hacer la gracia, prefirieran lo segundo. Demuestra lo mucho que nos falta por hacer, ya que los privilegiados no asumen que su entretenimiento no está por encima de mis sentimientos. ¿No hay quintetos de blancos a los que imitar?
Aparte de la carga histórica que tiene para los afrodescendientes de todo el planeta el black face, que en este país se practica todavía en muchas poblaciones en fiestas y cabalgatas, es significativo que en una cadena con tanta escasez de afrodescendientes en la plantilla, y más de cara al público, se permita hacer estas cosas.
Yo no soy nadie, y ellos tienen la ventana de millones de personas todos los días. Ellos pueden ignorarnos, o criticarnos y hacernos daño. Y no, no quiero censurarlos. Pero tengo derecho a enfadarme y a decir que Pedroche, Peinado, Fran Blanco y compañía, han actuado como unos perfectos imbéciles.
Harta, muy harta.
Podéis cabrearos viendo el vídeo. Los cinco minutos finales…
Ayomide Zuri
Inconformista, luchadora, africana y mujer negra. @ayomidezuri ayomidezuri@gmail.com
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Otra cosa. Nuestros esfuerzos se centran en muchas cosas. No creo que estés autorizada a dudar del compromiso de Afroféminas en la lucha antirracista. A diferencia de ti , no consideramos que haya cosas poco importantes en el racismo, como no las hay en los malos tratos, o en la homofóbia, o en el machismo, etc. Si crees que debes organizar un movimiento político, delante.
Por partes:
1-¿Que no estoy autorizada a qué?! ¿Tú me conoces?, ¿Sabes qué medidas he tomado en mi carrera para beneficiar a la gente de nuestro colectivo? Perdona, pero eres tú la que no tiene autoridad para decirme cuando puedo o cuando no puedo expresar mi opinión, más aún en un blog público. A ver si recuperamos voz de los machistas y me la quieres quitar tú. No estoy dudando de la valía de un movimiento -como expreso en mi siguiente punto-, eso me lo has adjudicado tú. Las personas son respetables, las ideas son debatibles -deben serlo-. No por que una idea esté dentro del conjunto de normas de un movimiento significa que no pueda ser debatible.
2-Repito, ¿Quién ha dudado del compromiso del movimiento? ¿Acaso plantear preguntas dentro de la idiosincrasia de un movimiento determinado equivale al desprecio del mismo? Parece que no se puedan expresar opiniones sin que la califiquen a una de alineada simplemente porque no se adhieren completamente a los bulletpoints de una ideología. El problema de esa mentalidad acaba en el rechazo de potenciales aliadas.
3-Y otra cosa, yo me estoy enfocando en el priorizar objetivos. Esto es un problema de relevancia. Si pones esto al mismo nivel que una lucha política la distribución de las energías que los miembros dedican a cada cosa es desproporcionada para el resultado obtenido. Es cómo comparar el tirar piedras contra un muro o dinamitarlo desde dentro.
4-Ya formo parte de la coalición morada y estoy luchando para mejorar la interseccionalidad desde dentro, gracias por la sugerencia.
Pues adelante. te queda mucho trabajo