El equipo jurídico de Afroféminas ha denunciado, ante la Valedora do Pobo de Galicia (figura homóloga al Defensor del Pueblo en la Comunidad Autónoma), la emisión de una serie de vídeos de carácter pornográfico en algunos hospitales pertenecientes al Servicio Gallego de Salud.
En concreto, se ha tenido conocimiento de que en el servicio de Ginecología y Obstetricia de uno de estos centros se estarían utilizando, para la obtención de muestras destinadas a la realización de seminogramas o espermogramas (prueba médica consistente en el análisis del material seminal para la determinación de su calidad con finalidades reproductivas), una serie de materiales de carácter audiovisual que representarían, tanto por su naturaleza como por su contenido específico, una verdadera manifestación de la objetivización de la mujer, violencia sexual y normalización de la cultura de la violación.
Específicamente se reporta que, en las salas especialmente habilitadas para la obtención de las muestras de semen, una pantalla reproducía una serie de videos o fragmentos de vídeos de carácter pornográfico; que vendrían a ser una recopilación de los momentos más álgidos y duros de diferentes escenas sexuales en las que existen representaciones directas de violencia y dominación hacia las mujeres.
En general, estos materiales representaban a los hombres en estadios o posiciones de poder, en contraposición con mujeres sumisas y obedientes, siempre dispuestas a la satisfacción [únicamente] del deseo masculino. En una de estas escenas, puede verse a cuatro hombres manteniendo relaciones sexuales con una sola mujer, realizando prácticas sexuales extremas, turnándose a la mujer entre los cuatro o, directamente, penetrándola todos al mismo tiempo. Otros fragmentos mostraban escenas como bukakes, así como diversas manifestaciones de violencia en el transcurso de la representación de la actividad sexual.
Estos son, como decimos, sólo algunos de los fragmentos de una más amplia recopilación de materiales basados en claros roles de dominancia-sumisión; que terminan convirtiéndose —en algunas de las escenas, de hecho, de manera literal— en roles de agresores-agredidas.
A pesar de que no faltará quien considere que este tipo de material es inocuo, la realidad muestra que este tipo de consideraciones parten de la propia normalización de la cultura de la violación; que es precisamente lo que promueven estos materiales. Pero, aún más: pensemos que estos videos van destinados a potenciales futuros padres. El riesgo, entonces, se multiplica: si se alimenta en el padre la relación directa entre excitación y violencia sexual, ¿qué valores esperamos que pueda transmitir al futuro hijo o hija sobre la violencia, las relaciones sexoafectivas, el consentimiento o el respeto?
Tras la presentación de esta denuncia el pasado 15 de junio, ésta se admite a trámite el 25 de junio, iniciándose por parte de la Defensora del Pueblo gallego una serie de actuaciones de investigación contra la Consejería de Sanidad.
Como respuesta a dichas actuaciones, el 15 de julio se comunica la conclusión del procedimiento con resultado positivo, habiéndose acordado por parte de dicha Consejería la retirada de estos materiales:
«Tras recibir su escrito y valorar el contenido, desde la Jefatura del Servicio de Ginecología y Obstetricia se considera que este material puede dañar algún tipo de sensibilidad o entenderse como inapropiado, por lo que se procede a retirarlo».
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