El pasado 19 de febrero el Senado de España aprobó la candidatura de la Cabalgata de Alcoy a Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, a pesar de contener elementos vinculados a la esclavitud y obviando las protestas y quejas de grupos antirracistas y de la comunidad afrodescendiente. Por consiguiente el Ayuntamiento de Alcoy va a iniciar en breve los trámites para pedir ese reconocimiento.
Aunque la iniciativa fue presentada por el Partido Popular, fue apoyada por el Partido Socialista, Podemos, Ciudadanos, Izquierda Unida, el Grupo Parlamentario Vasco y Esquerra Republicana de Catalunya.
Como hemos subrayado en muchas ocasiones, no somo ingenuas y esto no nos sorprende. Nuestras reivindicaciones son recibidas con desdén y risas por unos, incompresión por otros y paternalismo por el resto. Mucho tienen que cambiar estos políticos nuestros para que reciban nuestro apoyo.
La unanimidad pone el foco en una realidad incontestable: las necesidades de la comunidad afrodescendiente/negra en España son un asunto sin importancia y somos un colectivo prescindible. Tendemos que sacar conclusiones.
La herida que provoca esta resolución es más profunda si cabe con el propio texto aprobado. No hay valor siquiera a poner en claro lo que representan los personajes de los pajes alcoyanos. Los conocidos siempre como «Negrets» es decir NEGRITOS, se convierten en la resolución en «pajes tiznados».
Los políticos que deben velar por todos los ciudadanos, incluidos los afrodescendientes, pero nuestros representantes nos ignoran. Ponen antes no perder votos en Alcoy y Valencia, que atender la dignidad de cientos de miles de ciudadanos que viven y trabajan en este país.
Un aviso, nosotras seguimos. Si estas Navidades hicimos ruido, lo que viene será mayor. Ahora hay más organizaciones al tanto, se movilizará más gente y llegará más lejos la noticia. Nos vemos pronto.
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El negro #000000 no es un color de piel de nadie. (???)