Cuando vine a España, durante mi infancia, todo me parecía «maravilloso», rodeada de una nueva familia y de nuevas personas. Me encantaba mirarme al espejo y no me sienta diferente de las demás personas.
En aquella época de mi infancia yo era la única negra de la escuela, pero siendo tan pequeña, no me daba cuenta de ello. Lo veía como algo normal y pensaba que yo no era diferente a mis demás compañeros. No le daba importancia a mi color ni mi etnia.
¿POR QUÉ ERES DE COLOR MARRÓN?
¿POR QUÉ NO ERES COMO NOSOTRAS?
Desde ese momento dejé de aceptarme como era, comencé a sentirme distinta e inferior a ella, a todas mis demás compañeras.
Llegó el quinto curso de primaria, todo nuevo , pero para mi comenzó mal. Me sentía aún peor que en los cursos anteriores, a tal extremo, que ya no quería ir más a la escuela desde que un niño me grito ¡¡NEGRA VETE A TU PAÍS !!
El último curso de primaria, en sexto, seguía recibiendo comentarios ofensivos, burlas y discriminación por el simple hecho de ser negra.
Todo esto y como me sentía, se lo comenté a mis padres, a la directora del colegio y a otra profesora del centro.
Pero mi sorpresa fue que ellos intentaban hacerme ver que esos comentarios no eran importantes. Vamos, que lo querían dejar correr.
Hace unos meses, en el grado medio en el que estoy , una profesora empezó a decir comentarios que no venían al caso con lo que estábamos dando.
Uno de ellos fue: TRABAJAR COMO UN NEGRO.
La segunda vez que lo dijo, yo la llamé la atención , la dije que aquel comentario era un poco ofensivo, despectivo y discriminatorio y que por favor , no lo dijera más veces.
Lo que mi profesora me dijo como respuesta y como resultado final, fue que TRABAJAR COMO UN NEGRO, era una frase hecha normal típica, que no malentendiera tanto las cosas y que no me podía asegurar que esa frase no lo volvería a decir.
Mi profesora, no volvió hacer ningún comentario de ese estilo, pero desde luego me di cuenta que intentó ocultar la realidad de la expresión y pretendió convencerme de que interpretaba mal las cosas .
Hoy pienso, que muchas personas, cuando les dices que te molestó lo que dijeron, un comentario realmente ofensivo, racista o discriminatorio, intentan como sea ocultarte lo que verdaderamente es.
¡No dejemos que esto nos pase!
Luchemos por nuestra identidad y por nuestra etnia. No dejemos pasar aquellos comentarios como algo normal en nuestras vidas.

Beatriz Martín.
Estudiante de Atención a Personas en Situación de Dependencia.
18 años.
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Entiendo perfectamente lo que dices y yo siempre intento no caer en el tópico de «frases hechas». Personalmente, la expresión «trabajar como un negro» nunca la he entendido como despectiva, porque se dice de alguien que trabaja muy duro (lo cual es digno de elogio). Aunque está claro que su origen proviene de aquellos que fueron obligados a trabajar muy duro ajenos a su voluntad.
Otra frase similar a la que nunca le he dado connotaciones negativas es «trabajar como un chino», que denota trabajar muchas horas (tampoco descalificativo).
Aún así, hay que ser consciente que la intención del que habla y el que escucha puede ser diferente y tener empatía con quien sufre diariamente el racismo.
Pues si el esclavismo no te parece razón suficiente para ver que sí es una frase racista, sin tener que apelar a la empatía, yo no digo lo que pienso (apelando a la empatía).