Hace unas semanas tuvo lugar la Asamblea General de las Naciones Unidas, en su apertura del 73º período de sesiones.
Un homenaje irónico, una reflexión real.
He caído en un mar de confusión después de ver las noticias de la UNGA (Asamblea General de las Naciones Unidas en sus siglas en inglés), es que no se si considerarlo como un debate responsable que se encarga de los asuntos más problemáticos del mundo, y en el que están representados sus 193 miembros, que son los líderes del mundo “DUEÑOS”, o tomarlo como un monólogo nostálgico sin sentido.
La apertura del 73º período de sesiones, hizo unas risas, y derramó algunas lágrimas, las risas por el humor de San Trump hablando de que su administración ha logrado más que cualquier otra en la historia de EE. UU. De verdad que sí, también tenemos que dar a cada uno su derecho, la administración de Trump logró el odio más absurdo en su trayecto como presidente. Contribuir con fronteras de racismo, tampoco es poco trabajo.
Y las lágrimas han sido por tanto reír; el representante de Italia estaba muy emocionado, por su idea sobre lo que debemos hacer hacia los migrantes, y poner fin al problema. Me acordé del día 11 de junio, cuando el barco de rescate Aquaruis estuvo buscando tan solo un puerto donde desembarcar, y Matteo Salvin, el ministro del interior italiano, bloqueó el puerto, twitteando “Victoria, por primera vez un barco no se desembarca en un puerto italiano” tras la llegada a Valencia (España) del barco. Habría sido mejor si se hubiera callado.
Negarse a abrir los puertos a 629 personas, entre ellas 7 mujeres embrazadas, y 123 menores solos, es igual a procurar una catástrofe humanitaria. Jugar con la carta de los migrantes nunca falla, por ello todos han aplaudido después la palabra del representante italiano, olvidando a los que se hundieron en el mar. Me gustaría que se pongan en la piel de los que pasaron días en el agua, para ver cuánto dura su sonrisa humilde.
Siria, ah por Siria, una de las cartas más jugadas durante todas las citas de la UNGA, la tragedia del pueblo sirio ha sido bien poetizada por todos los representantes. Todos ocupados por salvar Siria, construirla de nuevo, pero lo único que están haciendo es violarla. Sumirla en más conflictos.
Irán, uno de los países que más víctimas de agresiones sexuales tiene, es uno de los más religiosos “Que se mantiene a un nivel ético superior’’ y que lleva la bandera Islámica siempre arriba. Su presidente Rohaní notificó que “Hay dirigentes mundiales que fomentan el nacionalismo y racismo extremistas, con tendencias xenofóbicas similares al nazismo”. Además denunció a los buscan la hegemonía mundial, y señaló que son enemigos de la paz.
Está bien luchar por los derechos y valores humanos, pero antes hay que saber que en Irán la mujer lo puede hacer todo, eso si, amortajada en casa.
Y una de las noticas que me ha dejado más alucinada “Israel tiene un futuro brillante en la ONU”. Creo que está claro y no se necesita comentar nada más. Los que alimentan el terrorismo ya son los aliados estratégicos de la paz y la seguridad.
Y no se puede olvidar discutir sobre la solidaridad y apoyo al medio ambiente, un objetivo sostenible muy importante. Espero que se den cuenta de que se respira química en África, y en Sudamérica hay una epidemia de cáncer. La tierra vomita tóxica, por la contaminación que exportan por todos los lados.
Un Show, espectáculo de gente elegante de primera clase, debatiendo dentro de un congreso acondicionado por los sufrimientos, conflictos, dando palabras bien potentes, haciendo difundir esa sensación de que estamos andando hacia un mundo mejor, entre buenas manos que están de verdad preocupados por los que duermen por las calles, y que los que comen de basura o los que se ahogan todos los días en el mediterráneo buscando el pan en otra orilla. En fin, lo que queda son los hechos no las palabras bonitas.
Hay que bajar el telón, de una vez por todas, de esta obra de teatro barato que se llama hipocresía y que negocia con el dolor y la guerra.
Nourhán Elshamy
Interprete cultural egipcia. Defensora de los derechos humanos.
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Nourhán: Felicito y admiro tu valentía, me sumo a tus palabras, porque el mundo está desamparado ante tanta injusticia y tanta hipocresía, para colmo han acuñado nuevas frases: «Invasiones humanitarias» «Bombardeos humanitarios» «Defensa de la ¿Democracia? mientras invaden para saquear los recursos naturales de países que ya han estudiado para tal fin…ya el descaro los delata, y le toca a los pueblos organizarse para defenderse. Viva la Paz,