Ya llevamos dos días intentando llamar la atención sobre una fiesta que nos ha sorprendido de manera negativa. La Navidad de Alcoy, que tiene entre uno de sus actos más representativos a los llamados pajes o patges en valenciano, también negrets. Se trata de un blackface masivo que insulta a toda nuestra comunidad.
Estos personajes, por supuesto anónimos, se dedican a repartir regalos, suben y bajan escaleras, pisos y entrar en casas. Hasta ahí todo genial, pero ¿porqué el betún?
El tema de las tradiciones es algo peliagudo, no podemos esconder detrás de éstas actos anacrónicos, que además ofenden a un sector de la población.
Nos sorprende que un Ayuntamiento de progresista nadie viese al inoportunidad de esa imagen en el cartel. Nos sorprende tal miopía. Entendemos el silencio, no hay mucho que decir sobre el tema.
Esto ofende, ofende mucho. Ofende por que estereotipa, ridiculiza, no incluye y falsifica nuestra imagen. Somos reales, no somos personajes de fantasía que no se encuentran en las calles de Alcoy y del resto de España. No podemos aludir al pasado para evitar los cambios. Estamos aquí y nos duele vernos como una payasada sin personalidad, sin matices, sin humanización.
Las tradiciones son cambiantes y deben adaptarse a los tiempos. Esto es vital para nuestra convivencia, donde las ofensas a sectores de la población son eliminadas. Alcoy no puede ser una excepción.
Alcoy quiere que UNESCO le de a su Navidad el título de patrimonio inmaterial de la humanidad. No creemos que el blackface masivo que practican ayude (en países de nuestro entrono esto se ve simplemente como una barbaridad). Nosotras, por nuestra cuenta, enviaremos a través de instituciones amigas de carácter internacional una carta a UNESCO para que no lo conceda mientras dure el Blackface. Los pajes podrían ir sin pintar de negro y nadie se sentiría ofendido.
No tenemos mucha fe en que nadie se retracte. Más bien somos conscientes de que vamos a recibir ataques muy duros por esto, así que nos remangamos y nos preparamos para la lucha. Nos gustaría que los representantes del Decenio afrodescendiente en España se pronunciasen.
Lo decimos alto para que quede claro: Los negros no somos seres de fantasía, Los negros tenemos dignidad y estamos aquí para hacernos oír.
Afroféminas
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Cuando hablamos de racismo hablamos de exclusión social hacia un determinado grupo etnico en ánbitos generales, rechazo, marginación y un largo etc..
Pueden darse opiniones diversas y más bien personales en personas con escasa enpatia; pero Alcoy como en casi todas las ciudades de la comunidad valenciana la convivencia intercultural es una evidencia clara.
Históricamente nuestra comunidad autónoma sufrido desde tiempos remotos numerosas invasiones y colonizaciones; desde los celtíberos, romanos hasta llegar a la conquista árabe.
Dejando una huella cultural y un patrimonio rico, muchos de estos pueblos convivieron en paz y armonía hasta la llegada de la reconquista cristiana por parte de los reyes católicos ha mi modo de ver la más nefasta actuación y segregación tras la expulsión judía y árabe.
Los tiempos han cambiado, os cuento una pequeña historia de Alcoy mi ciudad; una ciudad que luchó por sus derechos antes y después de la guerra civil, antes por la explotación obrera en donde los derechos de los trabajadores tanto hombres como mujeres sufrió el más deleznable de los tratos.
Y Alcoy luchó con todas sus fuerzas por esta segregación social, las gentes más desfavorecidas empezaron a levantar la voz y a ser escuchadas, sobre todo las mujeres, la lucha de la mujer en Alcoy ha sido todo un hito tras la revolución industrial.
Mi madre me contaba que cuando una mujer reclamaba un salario justo y un trato digno en las fábricas se la llevaban presa y como castigo se le rasuraba el pelo como signo de umillacion, pero ellas jamás dejaron de luchar.
Nuestras razas y credos no son tan diferentes todos hemos padecido la discriminación y el maltrato.
Pero estamos aquí para tratar el tema del racismo en una celebración en donde el color parece ser la nota discordante; sin pensar en que Alcoy celebra la cabalgata una vez al año, una ciudad solidaria que siempre con numerosas asociaciones en pro de los derechos sin tener en cuenta nacionalidad alguna ni procedencia.
Siempre he creído que las luchas han de empezar por un@ mism@ pero denostar la identidad de todo un pueblo no faborece a nadie.
Afrofeminas se dirige a una lucha sin tener en cuenta que los pueblos sean de la raza que sea han de aprender a convivir con la diversidad.
Aplaudo vuestra organización desde el punto de vista de los derechos civiles, pero tenéis que tener en cuenta que en Alcoy llevamos siglos defendiendolos muchos desgraciadamente murieron defendiendolos pero crearon un precedente de justicia; mujeres y hombres que se negaron al sometimiento, os invito a que conozcáis nuestra historia partiendo desde la base, porque todos tenemos una historia que contar.
Un saludo
Bravo Cristina