ntang: de la lengua fang*(blanco)
Yo les llamo ntanganizados. Tienen las mentes más lavadas que los antiguos emancipados. Este verso es de la canción» mercenario»del rapero guineano Mr. O, dónde critica a los afrodescendientes de Guinea Ecuatorial en concreto nacidos o criados en Europa, a los que el rapero acusa de falta de amor por sus raíces y cultura africanas y de ser blancos con máscaras de negros, es decir «ntanganizados»
Hace unos días escuchando la canción, me di cuenta de algo: he sido una negra «ntanganizada», pero en mi defensa debo decir lo siguiente:
Yo nací en África a finales de los 80, nací negra y africana, pero occidentalizada y «ntanganizada» y no soy la única. Creo que toda mi generación y toda la posterior nació y creció ntanganizada/occidentalizada. Cierto es, que tuvimos contacto continuo y permanente con muchos aspectos de nuestra cultura propiamente africana. De hecho la mayor parte de mi generación, aquellos que han crecido en Guinea Ecuatorial, conocen y hablan sus lenguas autóctonas, conocen y practican muchas de sus tradiciones y las ideas de las mismas están incorporadas en cierto modo dentro de su escala de valores, es cierto.
Pero también es cierto que aprendimos a leer en castellano (recordar que pensamos en la lengua en la que hablamos), que descubrimos primero a El Cid Campeador que a Ngolua kiluange; que querríamos morir mártires, como los misioneros que hace siglos llegaron a nuestro continente para traernos luz, Dios y civilización, y a los que unos salvajes africanos (que para nada identificábamos con nosotros) solían matar empeñados en proseguir con sus culturas “paganas y salvajes»
No es cierto acaso que conocimos y admiramos primero la revolución del mayo francés, cuando nuestros propios padres acababan de protagonizar una epopeya, pertenecían a la generación que ,había declarado soberanas e independientes a sus naciones; negaremos acaso que de mayores querríamos ser RAMBO JEAN CLAUDE VAN DAMME, o JAMES BOND, personajes de héroes ficticios diseñados para transmitirnos la idea de la supremacía blanca ,mientras desconocíamos la mayoría a tomas SHANKARA,a jomo KENNYATTA y a Julius K.NYERERE,…
No voy a mentir, el hombre de mis sueños siempre era caucásico, el hombre blanco aventurero, valiente y generoso, siempre dispuesto a proteger a los débiles en África, Asia o América Latina. Siempre el héroe que luchaba contra unos villanos, que solían ser precisamente nativos de esos mismas regiones, un max dada, en CIUDAD DE LA ALEGRIA, un INDIANA JONES, amigo de aquel muchacho oriental(quien me iba a decir las tenebrosas connotaciones detrás de la idea de un cuarentón extranjero, amigo de un preadolescente)…pero no , en mi mente ntanganizada OCCIDENTE era tan solo ARQUIMEDES y PLATON, JULIO CESAR el emperador, HERNAN CORTES el conquistador, la revolución francesa,igualite,legalite et fraternite y por supuesto esa gran nación de ultramar levantada por colonos que se había convertido en imperio, y donde los sueños se hacían realidad: AMERICAH, OH AMERICAH.
No solía pensar porqué en las películas de aquel país, la gente de mi raza siempre aparecía en callejones mascando tabaco y dispuesta a robar y violar a esa pobre chica blanca que caminaba sola; oh dios mío, parecían unos seres tan horribles y por supuesto, yo no tenía nada que ver con ellos, yo en cualquier caso sería la chica blanca y por supuesto me querría ir con el héroe blanco y apuesto que siempre surgía en el momento justo, y derrotaba a 8 hombres negros, que parecían sorprendentemente torpes y estúpidos, a pesar de sus fanfarronadas y esas palabras tan feas que no se les caían de la boca.
Para mi occidente y los blancos eran: JUSTICIA, CONOCIMIENTO, BELLEZA, LIBERTAD y África y los negros: IGNORANCIA, DICTADURA, DELINCUENCIA. Y eso sin contar esas fotos de niños famélicos (jamás vi la foto de un niño famélico blanco, JAMÁS); esas escenas de guerras en Sudan, en Chad, de los telediarios; esos soldados con la piel negra con miembros humanos en la boca, EL SIDA….
Y la verdad es que fuera de la tele, fuera de los libros, cuantas veces no escuché en la escuela y en la calle, frases como: el negro /africano es malo, envidioso, perezoso, etc…Por eso va por detrás del blanco, dándose por hecho que aquella ausencia de virtudes era residuales entre los occidentales y los blancos; así que por supuesto no, no y no…Yo no me sentía representada con esa realidad, yo era una negra ntanganizada.
Pero la vida es la que te enseña, así que con 19 años y mi maleta llena de mis libros, leo a Voltaire, a Chesterton y he leído prácticamente a todos los autores de la generación del 27 y el 98 español. Si, yo era así de ntanganizada, para mí aquello era “la cultura» y yo quería ser culta y sobre todo con mi cabeza llena de la idea de OCCIDENTE, que había aprendido en mis libros y en la televisión, llegué a España, y no a cualquier lugar de España, llegué a Salamanca. ¡Ah! la Salamanca de Fray Luis de león, la de Góngora, la de Calixto y Melibea, oh ,oh ,oh… y sobretodo llegue a la materialización de mi sueño de occidente y europeo: asistir a la universidad más antigua de España, en aquella ciudad fría, con su paisaje tan gris y tan sobrio, así, como en las historias de mis libros.
Era el momento de conocer a esos hombres y mujeres europeos tan extraordinarios brillantes, virtuosos, justos, como en los libros y en las películas; de sumergirme en Occidente, en Europa!!…Pero la negra ntanganizada se llevó una profunda decepción, una tras otra, porque descubrí que, al otro lado del mar sólo había hombres y mujeres con virtudes y defectos, como los que había dejado atrás; descubrí que al otro lado del mar había una sociedad y una cultura con aspectos positivos y también negativos, con su historia de luces y sombras.
Si he de ser justa asumo que la negra ntanganizada, con esa idea de Europa, de Occidente y lo occidental, era carne de decepción; pero en fin, el caso es que el mito murió y nació en mi la idea de conocer mi propia historia, sumergirme en mi propia cultura porque me di cuenta de que apenas estaba en los libros, ni en los documentales, ni en la televisión e intuía que la parte que aparecía no podía ser la completa, porque si aquellos hombres y mujeres europeos con los que ahora estaba conviviendo no solo poseían conocimiento o virtudes etc., sino también poseían ignorancia, violencia y oscuridad, tenía que ser posible que los hombres negros y africanos no solo poseyeran oscuridad sino que también debían poseer cultura, conocimiento y una historia propia, contada por ellos. También tenían que haber sido héroes y sabios y reyes,…y empecé el proceso de desconstrucción, para convertirme en una mujer negra, que asume la influencia de la cultura occidental pero sin renunciar a la suya propia y que se esfuerza por aprender cada día, pero ya no solo de Occidente sino también de África, de Asia, y que en ese proceso ha descubierto que su historia, que la historia de su continente y de su raza, desde luego no solo es una historia de sombras, sino que es una historia como la de todas los pueblos y razas, de grandes sombras y grandes luces…he sido una negra ntanganizada, ahora soy una negra ciudadana de un país de ntang,y me siento mucho mejor.
Autora: Nso Mangue
Foto portada: autora
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Nso Mangue, enhorabuena por el artículo. Casi todos hemos vivido lo mismo y tenemos que hacer el proceso que has hecho para conocernos y aceptarnos. Hace poco escribí un libro: «Guinea Ecuatorial no está maldita», donde narró todo este proceso de reconstrucción que necesitamos. Puedes ver el resumen del libro en internet poniendo el título.