Identidad
– ¿De dónde eres tú?– De Cuba.– ¿Y tus abuelos de dónde eran?– De Cuba igual.– ¿Y sus abuelos?– No lo sé...
Mis tíos decían que la culpa de que yo viera una negra a mi lado era de mi madre por acostarse con un negro. La negra se reía a carcajadas cuando los escuchaba, pero ellos no la veían. Mi abuela me enseñó la Biblia y alisó mi pelo en cuanto pudo. Si hubiera podido cambiarme la nariz y los labios, lo hubiera hecho. De mi parte negra quedarán pocas cosas: la piel, el apellido y la carcajada fuerte. De parte del negro solo existía él y su padre, que conocí una vez. Era un médico de piel bien negra como los calderos, quien también tenía una hija muy negra igual. Pero esa gente era nada para mí.
Imagen generada por IA
La negra siguió apareciendo, a veces me miraba desde l...