Beyoncé ha movilizado a medio internet después de publicar su último single Formation y de su actuación en la Superbolw. Lo poco que ha llegado a los medios españoles parece que no está recogiendo la repercusión de todo ello en la comunidad afroamericana, y se está centrado en aspectos estéticos que desactivan el mensaje político que mucha gente percibe en las actuaciones de Beyoncé.
Formation se inicia con una inocente pregunta: ¿Qué paso después de Nueva Orleands?. Después de la tragedia del Huracán Katrina, que destapó la negligencia y la injusticia racial a la hora de actuar en emergencias naturales de este tipo, el 73% de las personas desplazas por el huracán eran negras, y 10 años después, la gran mayoría sigue intentando recuperarse económicamente.
En la letra, Beyoncé afirma I like my baby hair with baby hair and afros [Me gusta mi pelo de bebe y mi afro] criticando los estándares de belleza blanco-céntricos según los cuales el pelo rizado de las mujeres negras es feo y desaliñado, donde existe una presión social grande para llevar pelucas de pelo liso. Beyoncé fue muy criticada por la prensa por dejar que su hija llevase el pelo natural. No es la primera vez que la prensa se ceba con mujeres negras por usar su pelo malo natural. En el video, Beyoncé muestra a su hija, Blue Ivy, con el pelo afro en una posición empoderada, como respuesta a todas estas críticas.
La letra sigue I like my negro noise with Jackson five nostrils [Me gusta mi nariz de negra como los Jackson Five] en la misma línea, como una reivindicación de los rasgos afroamericanos que el canon racial blanco ha solido denigrar. Todo el video es una celebración de la feminidad y de la cultura negras de los estados del sur.
El video se lanzó unos días después del Día Nacional de Martin Luther King, así que en otro momento el video muestra un periódico llamado The Truth [La verdad] con la cara de Martin Luther King y el titular: More than a dreamer [Más que un soñador], recordando que King era también un activista.
Casi al final, la cámara recorre una pared en la que podemos ver un graffiti que reza Stop shooting us [Dejar de dispararnos] en relación a la violencia policial sufrida por las comunidades negras, y en el contexto de #BlackLivesMatter. En otra escena, un niño con una capucha negra baila delante de una fila de policías que finalmente levantan sus manos en señal de rendición, otra referencia a las violentas muertes de jóvenes negros a manos de la policía, por vestir, por ejemplo, una capucha negra en un barrio de blancos.
Un día después de la publicación del vídeo, Beyoncé actúo junto a Bruno Mars y Coldplay, en la famosa gala de la Superbowl, ante más de 100 millones de personas que siguieron la gala por la TV, más la audiencia presente. El show que presentó iba en esta misma línea de reivindicación de la experiencia negra. En el clima de inestabilidad racial que estas comunidades están viviendo, Beyoncé presento a un elenco de bailarinas vestidas en referencia a las Panteras Negras, vistiendo la gorra de lado y luciendo los pelos afro.
En un momento mientras bailaban, la posición de las bailarinas formaba una enorme X, en homenaje a Malcom X.
Este año 2016 se conmemora el 50 aniversario de la fundación de los Panteras Negras, la cual se creó a unos 50km de donde estaba teniendo lugar el show. La madre de Beyoncé, Tina Knowles, posteaba una foto en el backstage donde aparecen todas las bailarinas levantando el saludo de las Panteras Negras, como hiciesen Tommy Smith y John Carlos en las Olimpiadas del 1968.
Otro post del backstage enseñaba una foto de las bailarinas pidiendo justicia por la muerte de Mario Woods, un joven de 26 años asesinado por un policía en San Francisco el pasado Diciembre.
Es cierto que como siempre ha habido voces en contra que no ven en Beyoncé un modelo del todo positivo, han llegado a decir que su video era antipolicial, criticando que convirtiese un evento deportivo como la Superbowl en una plataforma de denuncias políticas, o incluso de capitalizar la tragedia del Huracán Katrina.
También ha sido mucha la gente que la ha defendido, y han visto en su vídeo y actuación un ejemplo positivo de como la cultura pop no está necesariamente reñida con la denuncia política. Desde luego de lo que no podemos acusarla es de no mojarse en este debate.
Autora: Elena Herrera Quintana
Nueva colaboradora de Afroféminas
Realizando su doctorado sobre las relaciones entre feminismo y la cultura pop
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