El otro lado de la frontera
Me acuerdo como si fuera hoy. Bajándome del bus en el lado sur de mi ciudad con mi amigo, blanco, charlando, riéndonos después de haber pasado una noche festejando con nuestras amistades en el centro. Ya casi nos íbamos despidiendo cuando escucho alguien gritar: “IF I SEE YOU AGAIN NIGGER, I’M GONNA KILL YOU” [si te veo otra vez negra, te mato]. En ese instante sentí todos los músculos dentro mi cuerpo recogerse a una vez, mi corazón- sin latir- y una vergüenza ajena de haber sido humillada en un lugar público- sin nadie que dijera algo, sin nadie que me defendiera. Pero lo que más me dejó inquieta esa noche, fue el silencio que mantuvo mi amigo, hasta el día de hoy.
Nunca se me han olvidado esas palabras que se gritaron hacia mi esa noche; y a medida que he crecido, me he encontra...