El desafío político de la maternidad
Yo ya fui niña, ya lo viví, pero fue otra época y si hay algo que he aprendido en estos trece años de maternidad es que debo desaprender el adultocentrismo que me gobierna para poder ver a través de sus ojos.
Yo ya fui niña, ya lo viví, pero fue otra época y si hay algo que he aprendido en estos trece años de maternidad es que debo desaprender el adultocentrismo que me gobierna para poder ver a través de sus ojos.
El duelo ancestral que la colonización nos legó cambió el curso de nuestros cultos y nos obligó a escondernos, a sentir miedo, a sentir vergüenza, a apropiarnos del cristianismo blanco y eurocéntrico, quedándonos sin fuerzas, energías y entidades, dejando de lado el amor por nuestra identidad étnica y por nuestra ancestralidad.
Tener voz, emitir palabras, da cuenta de nuestra existencia, a través del pensamiento. Nos reafirmamos como sujetas cognoscentes , portadoras y generadoras de conocimiento y saber, cotidiano o académico, pero siempre desde nuestro lugar social que a la vez es un lugar de localización de poder dentro de la estructura social y NO sólo o necesariamente por la experiencia o la vivencia individual.
Son las experiencias de discriminación racial, la preocupación por la igualdad de género y la reivindicación por el autorreconocimiento étnico sumado a la toma de conciencia sobre nuestra herencia africana lo que lleva a que orgullosamente nos denominemos hoy AFROfeministas.
Les prometieron a sus votantes mano dura a la inseguridad, pero en estos cuatro meses de gobierno en Uruguay han sido asesinadas 11 mujeres a manos de sus parejas, familiares o ex parejas varones, siempre varones.
Apenas tengo tiempo para detenerme a pensar, a descansar, a disfrutar y por momentos, creo que apenas tengo tiempo de respirar. Respirar es peligroso, igual que salir, igual que el contacto con otres. Respirar es peligroso. Bajo esa premisa se disfrazan mil y unas jugarretas políticas que no sé hasta qué punto estaban calculadas o si acaso, es puro azar.
En los último días han circulado algunas noticias relativas al impacto de la pandemia coronavirus en la población afrodiaspórica. Y se vuelve a leer comentarios del tipo: “es terrible” “no puedo creerlo” etc, etc, todos comentarios tibios, que reflejan que a pesar de las aberraciones a las que estamos expuestas las personas afro el antirracismo aún es considerado una exageración.
Soy mujer, negra, afrouruguaya, migrante. Quizás , debería arrancar describiendome por este último, ya que vivir desde los 4 hasta los diecisiete años en Chile fue el primer marcador para entender mi situación, conocerme y comprender mis experiencias.
En la era del entretenimiento, ¿qué mejor manera de combatir, plantear y replantear estereotipos que desde los mass media? La industria del entretenimiento ha sido el epicentro de gestación de varios estereotipos reproductores de prejuicios sobre las personas negras.
El Estado tiene la obligación de garantizar derechos a sus ciudadanos y ciudadanas, se ocupa de ello a través de las políticas públicas universales es decir, las que comprenden al conjunto de la ciudadanía. Pero, cuando estas no son suficientes para garantizar los derechos de TODES porque una parte de la población dada su situación de inequidad y/o vulnerabilidad requiere de un paso extra para equiparar su situación al resto de la ciudadanía y así gozar del mismo derecho en las mismas condiciones entonces el Estado se ve obligado a actuar focalizadamente, con políticas focalizadas.
Las feministas negras sabemos muy bien que el género de por sí es insuficiente para poder pensar universalmente, porque el género puede ser a la vez una categoría de opresión o una categoría de privilegio… todes estamos pivotando entre posiciones subalternas y opresoras constantemente.
No sólo minimizan y vapulean tus propias experiencias, aquellas que contás por que tenés las suficientes fuerzas internas, herramientas resilientes y sentido común como para compartir algo íntimo, doloroso y a veces traumático apostando a su comprensión, desarme y erradicación. Sin embargo lo que encontrás son caras de sorpresa que rápidamente se convierten en corazas y argumentos sacados de abajo de la manga cual salvavidas para no ahogarse en la evidente verdad.
la información es poder y que sólo se puede tomar acciones para transformar o revertir una situación o condición cuando ese fenómeno se conoce, por tanto no existe la posibilidad de hacer políticas públicas sin antes, haber generado conocimiento. En el caso de la población afrouruguaya así como de otras mal llamadas minorías la cuestión es que, hemos sido tan minorizadas históricamente que ni en los registros oficiales hemos aparecido,lo que ha producido lo que se denomina la “invisibilización estadística” y por eso nuestro reclam
María Fernanda Silva, Afroargentina, descendiente de inmigrantes de Cabo Verde será la primera mujer en ocupar el cargo de embajadora de la Republica Argentina en la Santa Sede.