Crónicas de una cubana de otra galaxia de vacaciones en La Habana (part1)
Son las cuatro de la mañana. Me despierta un correteo misterioso de chancleticas y frases entrecortadas. A lo lejos, siento el grito de mi vecina Nancy, llamando a su perrita Cuqui, que anda descompuesta, y hace como tres días que no pisa el barrio. Me río pensando en las aventuras de la cuquita, loma arriba, loma abajo. Y me acurruco en posición de feto,bajo el ronroneo melódico del ventilador.
Las seis y media me da un bofetón, obligándome a que deje la seguridad de las sábanas, bajo el olor hipnotizante de la tacita de café, que mi abuela me alcanza a la cama.
-Es el de la bodega ,m'ija. Está mezclado con un poquito de chicharo, pero creo que está bueno- se disculpa la señora, con dulzura y preocupación, esperando me sienta cómoda después de tanto tiempo.
-Es el mejor...