¡No soy una «morena«, no! ¿por qué tienes miedo de llamar a una persona negra? Sé que muchos de vosotros podéis haber leído el título del post y haber pensado «¿por qué es necesario decir negrx?» Tal vez desconoces que los afrodescendientes en muchos lugares aceptan y exigen que se les llame negrxs. Durante décadas, siglos de hecho, la sociedad ha enseñado a sus ciudadanos que ser negrx, es una cosa terrible. Incluso alguna gente negra, durante muchos años rechazó esta clasificación, prefiriendo términos como morena o mulata. Todo fue antes de pasar por el proceso de «reconocerse como negro». Reivindicar el derecho a ser negro en un mundo que prefiere invisibilizarnos, es un problema. Por eso debemos seguir diciéndolo fuerte … morena no. Negra!
No soy «morena», no! No rechazo lo que soy, y así es como nos nombramos y debemos reconocernos ¿Porque ese intento de dulcificar o disfrazar?
El mejor consejo es que no tengas miedo de llamar negro a una persona negra. Esto no ofende, o no debe ofender (por supuesto puede influir el tono, pero no es eso lo que tratamos hoy y además puede suceder con cualquier denominación: judío, mujer, indio, italiano, alemán, etc).
Durante mucho tiempo, la mujer negra se puso de perfil sobre sus propias identidades debido a una opresión y subvaloración histórica. Esto hizo que renunciaran a su propio color. Estamos en un momento en que la mujer negra ha empezado a ser oída, ha comenzado a convertirse en un personaje en busca de un protagonismo y tiene representaciones cada vez más fuertes. Gradualmente más mujeres han comenzado a ennegrecerse por todas partes y tienen auténtico orgullo de su color. Sentirse negra es maravilloso y así comienzan muchas mujeres a entenderlo.
Todo el asunto alcanza nuestra autoestima y es que esto nos hace lo suficientemente fuertes como para buscar nuestros derechos diariamente. Una mujer negra tiene que luchar diariamente por una vida digna.
Por favor llámanos negras!!! Esto es empoderamiento, es representatividad, es una lucha que estamos ganando. Cuanto más adeptas tenga la causa, más espacios pueden ser ocupados.
Redactora de Afroféminas, Madrid
ayomidezuri@gmail.com