El jugador de baloncesto y ex jugador del Unicaja Jayson Granger denunció haber sido víctima de insultos racistas con expresiones como «mono» y «negro cagón» emitidos en la cancha por jugadores rivales y por espectadores. Granger, quien es base en el Club Atlético Peñarol desde 2023, compartió a través de su cuenta en Instagram un mensaje en el que reveló haber sufrido racismo en el partido que enfrentó a su equipo con el Club Atlético Aguada del pasado viernes.
Como explicó en su mensaje, el jugador decidió exponer la situación tras las repercusiones de un incidente ocurrido en el partido anterior entre ambos equipos por la Liga Uruguaya de Básquetbol, en el que Granger hizo al jugador del Aguada Santiago «Pepo» Vidal gestos amenazadores de muerte. Si bien el base del Peñarol se disculpó tras el incidente, también con un mensaje escrito divulgado en sus redes sociales, alegando que había sido una reacción «salida de tono» por «perder los nervios» ante «el racismo», la Federación Uruguaya de Basketball (FUBB) lo sancionó por tres partidos por las amenazas. Su club pudo evitar la sanción pagando una multa económica. Granger volvió a jugar frente al equipo de Vidal el viernes, un partido que culminó con una nueva derrota para el Peñarol por 88-74 y tras el cual el base hizo sus declaraciones en Instagram.
«Por el bien de la competición y como así se me asesoró, he guardado silencio hasta ahora sobre lo que pasó el día de mi incidente con el compañero Vidal. Pero después de lo que pasó ayer en el partido, una vez más vuelvo a sufrir el racismo y el odio gratuito de una cancha llena en un espectáculo deportivo y me veo obligado a hablar», escribió. Según Granger, durante el partido, el insulto «negro cagón a voz en grito de todo un estadio» fue uno de los varios insultos racistas que recibió como parte de la que identifica como una práctica reiterada en Uruguay «al intentar salir a jugar al básquetbol».
«Esto al parecer acá se tolera y se ha llegado a naturalizar de tal punto que no se le da la mínima importancia, cuando en casi cualquier otra parte del mundo se tomarían medidas al respecto inmediatamente. Acá nadie hace nada. Se mira para otro lado», dijo. A lo que reiteró que sus gestos en la cita anterior, que, recogió el periódico local El Observador, emulaban «apuntarle y dispararle con un arma» y «cortarle la garganta» a Vidal, «no fueron los adecuados» y por eso pidió disculpas, subrayó que surgieron «por el cúmulo de racismo y odio» experimentado. Granger dijo lamentar que estos insultos vinieran «también de boca del propio jugador rival», quien le dijo frases como «sos mío mono» y «negro cagón» que él transmitió al equipo arbitral para recibir en respuesta «sonrisas irónicas y comentarios como: ‘no lo oí’ o ‘no pasa nada, seguí jugando'».
«También lo transmití al Juez y a la Federación, pero al parecer no lo consideraron de importancia, comparado con mis acciones y mis gestos. Y al final, resulté yo, y solo yo, irónicamente, el culpable de toda esta situación de la que en el fondo soy víctima», remarcó. EFE