De todas las películas y series que has visto a lo largo de tu vida, ¿cuántas están protagonizadas por personas no blancas? Probablemente si te pones a contar te sobraría con los dedos de una mano, ya que la realidad es que las personas no blancas siempre suelen ocupar los espacios de personajes secundarios o a veces incluso no se incluyen en las narrativas de las historias de televisión.
Por este motivo, productores/as y directores/as han decidido cambiar el relato e introducir nuevos rostros racializados a la pantalla. Así ha ocurrido en series como Black-ish o Grown-ish, de la que ahora sale Mixed-ish. Una historia creada por Tracee Ellis Ross, que cuenta la vida de una niña mestiza y su familia interracial, en la que se introducen temas sobre racismo pero siempre desde la perspectiva del entretenimiento y el humor, sabiendo adaptarse a todos los públicos. Lo que provoca que esta serie sea, bajo mi punto de vista, mucho más dinámica y divertida que su predecesora.
Si todavía no has visto la serie y te apetece darle una oportunidad, te animo a que la veas aportándote varias razones por las que este show merece ser visto.
Identidad racial y mestizaje
La serie gira entorno a Bow, una niña mestiza que se aventura en su etapa adolescente y va descubriendo que supone ser “mixed” y vivir en una familia con padres de etnias distintas. Este personaje esta sacado de la serie de Black-ish, ya que Bow hace de madre en esa serie y ahora los creadores han decidido hacer una precuela de su vida a través de Mixed-ish.
Nunca antes se había trasladado a la televisión la historia que muchas niñas y niños mestizos han vivido y siguen viviendo, y todo que eso supone su día a día. Ya que, a pesar de estar ambientada en los años 80 en Estados unidos, se dan situaciones como el tokenismo, la aceptación del pelo afro o hacer frente a discriminaciones en el colegio, con las que cualquier persona mestiza o racializada puede verse identificada.
Familias interraciales
La familia de Bow es una familia que no entra dentro de la “normatividad” pero que es el ejemplo de muchas familias que viven en diferentes partes del mundo. La narrativa introduce diferentes personajes como por ejemplo el abuelo Harrison, un hombre mayor blanco que tiene actitudes racistas y que en ocasiones se ve en contraposición con otros miembros de la familia como puede ser la tia Denise o el padre de Bow, Paul. En la serie se ve claramente mediante la familia que un matrimonio interracial de una mujer negra y un hombre blanco, en un país como EEUU, supone muchos prejuicios. Pero también se muestra que dentro de estas familias el hecho de que habiten personas negras, blancas y mestizas, hace resaltar el racismo sistemático tan arraigado en la sociedad.
Educación en el Antirracismo
Los padres de Bow, Alicia y Paul, trasladan siempre a sus hijos los valores y la educación para hacer frente al racismo u otras cuestiones de la vida. Esto se va desarrollando mediante las diferentes situaciones que se abordan a lo largo de los episodios, y a la vez se traslada al espectador, con toques cómicos y divertidos, temas sobre antirracismo como el blackface o estereotipos de la mujer negra, entre otros. Un punto bastante positivo de la serie, pues resalta ciertos temas y los da a conocer al espectador.
Otras realidades Estamos demasiado acostumbrados a consumir películas y series donde los protagonistas son siempre los mismos, en su gran mayoría es un hombre blanco y en su menor parte una mujer blanca. Por lo que relatos como este no tienen cabida y Mixed-ish es un ejemplo de representación con la que no solo los niños/as de doble ascendencia se van a ver reflejados, si no también muchos adultos que en su infancia no tuvieron ese tipo de series para disfrutarlas.
Cynthia García
Graduada en periodismo por la Universidad Complutense de Madrid