Nunca imaginé cómo una mujer podía esconderse detrás de sí misma y sobre todo ocultar su verdadera belleza. Es el caso de Sandra: quién la ha visto y quién la ve ahora.
La invitamos a casa a ella y a su novio y cuando abrí la puerta menudo sorpresón. Sandrita se había cortado todo su pelo, se avistaba un afro muy chulo y yo no salía de mi asombro.
Aún así, como pasa siempre, cuando el cambio es tan reciente, no se sentía totalmente cómoda. Pero allí estábamos nosotros para decirle claramente lo bella que lucía. ¡Es que ahora es ella!
Ya me había adelantado que algo haría. Y las preguntas eran las típicas: ¿Qué me pongo, qué me echo? Y la entiendo. Yo también pasé por lo mismo. Llegar a España y comprar bolsas y bolsas de productos para el pelo y luego tirar bolsas y bolsas a la basura porque nada me servía. Afortunadamente los tiempos han cambiado y ya hay mucha gente, algunas entrevistadas en esta revista que pueden hablar largo y tendido sobre el asunto.
Lo mejor de todo, es que después de la transformación, Sandra se animó a decirnos que quiere ser modelo. Y pensé: no hay nada como sentirse bien consigo misma. Cuando hay felicidad por dentro, no hay forma de esconderla. Simplemente se ve.
Afroféminas: ¿Y por qué quieres ser modelo ahora?
Sandra: Porque aunque no suene tan bien, me gusto muchísimo y cuando estoy delante de una cámara me siento muy bien, se me ocurren muchas ideas.
También es que es algo para lo que nunca he tenido tiempo porque el violín no me deja tiempo para nada, pero aún así no renuncio a que algún día pueda introducirme en este mundo
A: O sea que es una opción que valoras en el futuro.
S: Si. No al punto de dejar el violín porque el violín es parte de mi vida. Tampoco te voy a decir que si no fuera violinista fuese modelo porque creo que hubiese sido muchas cosas jajajaja. Pero sí que me gustaría posar de vez en cuando. Sobre todo las sesiones de fotos me fascinan. Creo que tengo una imagen singular. Me gusta lo que veo en mí. Y ya no te digo si me acompañara el violín. Francamente me encantaría.
A: ¿Hay modelos en tu familia?
S: ¡No, qué va! Mi madre era médico y mis tíos maternos lo son. Por parte de padre la mayoría son músicos. Mi abuela estudió dirección coral, mi tío violinista, mi padre pianista y bueno, mi vida se ha repartido en estos dos mundos tan diferentes. Digamos que ser modelo sería mi aportación personal jajaja.
A: ¿Cuánto tiempo llevas con el violín?
S: Unos 16 años. Comencé en el año 1998 cuando tenía 8 años, en Cuba. Desde entonces he estudiado mucho. He sido profesora en dos conservatorios para niños. Ahora estudio ( ya casi termino) en el Conservatorio Superior de Zaragoza.
Pues aquí tenéis a Sandra. Una mujer que cumple cien por cien con el llamado “prototipo afro”. Solo buscando un poco y ya es posible divisar cuánto talento hay a la espera de una buena oportunidad. Desde Afroféminas esperamos que más temprano que tarde, mujeres bellas como estas, dejen de ser invisibles en España.
Antoinette Torres Soler
Directora y Fundadora de Afroféminas
Lic. Filosofía. Máster en Comunicación de Empresa y Publicidad.
Cubana y española
Madre, sobreviviente de cáncer y sobre todo BUENA PERSONA.