“Mis primeros años como árbitra tuve alguna que otra mala experiencia con algún comentario racista, pero jamás he tenido miedo” Mati Esteves-García árbitra y farmacéutica afrodescendiente

«Ver, callar y trabajar» es  una frase que ha tenido que decirse varias veces, a lo largo de su vida, la barcelonesa Mati Esteves-García Biajakue y, siendo fiel a su lema, ha logrado, con sólo 26 años, sentirse plena en sus dos profesiones: farmacéutica y árbitra. Su presencia, por ser mujer, afrodescendiente y llevar el pelo natural, puede llegar a desconcertar a algunas personas, tanto en la botica, como en los campos de fútbol, pero ella responde haciendo, creciendo y ganando, a cada peldaño subido, seguridad.