fbpx
jueves, marzo 28

Negras en la Política

En Panamá la presencia de las mujeres negras en la política es casi nula, principalmente los que están en estos puestos de poder son los hombres blancos cis heterosexuales, en su mayoría de clase alta, es decir, La Burguesía Panameña. Esto pasa por el sistema patriarcal, colonial, que es la base para que se replique el machismo y androcentrismo en todos los sistemas estructurales e institucionales.

Luego de la burguesía, le siguen los hombres negros, que dependiendo del nivel o estatus social que tenga de esa misma forma va tener, control y poder dentro de los espacios de toma de decisiones.

La mujer blanca seguido, que aún siendo una mujer blanca, esta por debajo del hombre negro, a pesar de ser negro, sigue siendo hombre y tiene privilegios.

De último tenemos a la mujer negra, hecha esta representación textual de los niveles de jerarquía, queda evidenciada la poca representatividad de las mujeres negras en la política, y las minúsculas opciones que tienen, para llegar a los puestos de toma de decisiones.

Hay que analizar cuando las pocas mujeres negras llegan a los puestos de poder, cuál ha sido el contexto para que llegara allí, y  todo lo que ha tenido y tiene que seguir aguantando para mantenerse en ese espacio. es decir, lo que deben aguantar en las elecciones y lo que deben resistir, ejerciendo.

Los sistemas tributarios, electorales están construidos para perpetuar las opresiones ejercidas por la supremacía blanca.

La representatividad de las mujeres negras, a pesar de estar en uno que otro puesto político importante, sigue siendo menor.

El tema de la representatividad es importante, no como pantalla para dar una impresión de interseccionalidad, como lo hacen ver los medios de comunicación, pero lo que hacen en realidad es ejercer tokenismo, sino más bien como reivindicación y la toma de los espacios que históricamente se les han negado a las mujeres y por lo tanto, a las mujeres negras.

“No debes ser la causa para defenderla”, esta es una frase replicada en distintos movimientos, incluso desde la clase opresora se escucha este discurso, sin embargo, con este pensamiento se desvirtúa el ceder los espacios a las personas racializadas para que sean elles mismes los y las que hablen por sí mismas, y se continúan replicando las políticas de represión hacia las personas negras en este caso, dejándoles sin voz, y finalmente tomando las decisiones por elles.

Los medios de comunicación hegemónicos, al igual que el sistema tributario electoral, están para seguir las reglas del juego sistémico racista, misógino.

En los medios de comunicación, tratan a las mujeres negras que están en la política como ignorantes o desconocedoras de la información.

Como vivimos en una sociedad con estereotipos muy marcados, y el modelo a seguir impuesto conscientemente es la mujer europea blanca, las mujeres que participan de la política y salen en los medios de comunicación, las “blanquean” para que entren en estos estándares de belleza, y se vean más agradables a la vista, quitándoles, arrancándoles su cabello natural afro.

Las mujeres negras que dejan su imagen como símbolo de resistencia a conciencia, son muy pocas, pero si existen. 

Incluso las postulaciones por parte de las mujeres negras en la política es poca, porque durante siglos se ha acallado, a la población afrodescendiente, incluso tapándoles la boca para que no pudieran hablar, ni suicidarse.

Dentro del imaginario de algunas mujeres negras y la sociedad misma, está implantado que les proveedores de conocimiento son las personas blancas, por lo que querer o esperar formar parte de estos puesto, no son aspiraciones necesariamente.

Muchas veces, dentro de la política algunas personas en puestos de mando, colocan a mujeres negras para cumplir simbólicamente con la pluralidad étnica pero cuando se analizan sus operaciones de poder, es decir, el grupo asesor de la campaña son blanques, personas negras hay, si, pero escasamente en la toma de decisiones. 

Los medios de comunicación juegan un papel fundamental dentro de las sociedades, ya que es mediante este medio que se reproduce el material de lo que les oligarcas desean que se difunda, para que las demás personas consuman y crean como única verdad.

Los ataques que reciben las mujeres negras en los medios de comunicación que, además cosifican e hipersexualizan, negando cualquier conocimiento teórico, que tenga la candidata negra. 

En resumidas cuentas vivimos en un país conservador, racista, misógino que cuenta con una estructura de poder que se actualiza constantemente para poder perpetuar el sistema de opresión hacia todo lo que se sale de la hetero norma.


Nasch Beitia Mercado

Estudiante de la Universidad de Panamá y militante feminista, antirracista.

IG @nasch01
FB @naschbeitia 


1 comentario

Deja un comentario