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martes, marzo 19

El Mataculebra, la máxima expresión de la esclavitud en el carnaval de Tenerife


No dejamos de sorprendernos con la capacidad de la sociedad española para normalizar actos brutales de contenido racista, disfrazados de un presunto contenido antirracista. Este es el caso del Mataculebra que se perpetra en el Puerto de la Cruz de Tenerife.

El vídeo habla por si solo y no diremos más de los que es un acto vomitivo y asqueroso de banalización del racismo y la esclavitud que asoló nuetra ancestralidad.

Se trata al parecer de una tradición que fue introducida en la Isla y particularmente en el municipio norteño desde Cuba por el emigrante canario D. Manuel Díaz, conocido como Manuel Catalina.

Sus descendientes, los Catalinas, siguieron representándolo en las fiestas de invierno portuense, guardando así la tradición hasta mediados de la década de los ochenta del siglo pasado.

Según dice una página Web del municipio es tradicional que los (agarraos a la silla):

Los niños, ataviados con la indumentaria tradicional de los esclavos cubanos, tiñen sus rostros y manos representando a los negritos chacandela que, portando una bandera y un tambor, desfilan en fila bajo el látigo del mayoral (único personaje blanco), que les impone matar la culebra símbolo del poder y del mal.

Así recorren las calles cantando la primera parte de la antigua letra del «Calabasón, son, son». Al llegar a lugares emblemáticos se escenifica la muerte de la culebra con la segunda parte de la letra. Muerto el ofidio se recoge el dinero entre los espectadores al son de la música del tambor.

Este acto se vende como una ridiculización del sistema esclavista. Cierto es que su sentido y realizado en sus orígenes en Cuba por personas esclavizadas en sus fiestas y celebraciones podía tener ese sentido. Realizado hoy en día, por escolares (podéis encontrar las fotos en Google de niños haciendo esta barbaridad) y con un black face de por medio, más bien, es una apología del esclavista y el racismo, además de una banalización del sufrimiento inconcebible de millones de seres humanos.

Hasta cuando seguirán pasando estas barbaridades?


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