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viernes, abril 19

La cuña, el palo y lo «azul» o por qué las personas negras reproducen en ocasiones la discriminación racial

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Una publicación cubana publica un texto ameno. Su lectura me atrapa, hasta que un par de frases me frenan sin dejarme avanzar.

“Quien dice ser su madre a todas, es una negra casi azul con gruesas pasas y prominentes senos”.

Lo llevo y lo traigo. Rumio. Lo intento engullir. Se lo paso a un par de personas quienes usan con conciencia las gafas antirracistas y me confirman que es de pésimo gusto referirse así a una persona. Y lo es porque cuando en Cuba se usa ese epíteto se quiere reforzar que una persona es extremadamente negra y por lo general el contexto en que se hace tal afirmación es racista.

Del otro lado surgen argumentos que defienden el uso de tales términos: que si el estilo literario, que si los gajes del oficio, que si el autor es «mulato»…

No obstante, no me queda duda de que el entrecomillado hace uso de términos harto racistas. Lo sé por mi propia piel que es “azul”.

Que el autor del texto donde se usa la frase sea «mulato» lo único que me confirma es que todas las personas hemos crecido en sociedades racistas y las negras y negros también. En mi opinión, no habría que juzgar de peor la cuña del mismo palo, no tenemos por qué medir entonces con otra vara, solo tendríamos que intentar que se de cuenta que él o ella es cuña y es palo a la vez y de esta manera crecerá su conciencia racial.

Por otra parte, me gustaría recordar que las herramientas del amo no nos ayudarán jamás a desarmar su propia casa, a menos que las usemos a nuestro antojo.

Lo anterior justifica que, por ejemplo, mi bitácora personal se llame “Negra cubana tenía que ser”, pues parto de la creencia racista de que de las personas negras siempre tenemos algo malo que esperar para decir entonces: Soy negra y qué o precisamente por ser negra es que digo esto.

De esta manera, si se van a usar este tipo de frases, luego de entrecomillarlas habría que sugerir, estimular, plantear su crítica. No basta con reproducirlas.


Sandra Abd´Allah-Álvarez Ramírez

Licenciada en Psicología por la Universidad de La Habana, 1996; Máster en Estudios de Género, 2008; y diplomada en Género y Comunicación por el Instituto Internacional de Periodismo José Martí. Diez años de experiencia laboral como editora y periodista del sitio web Cubaliteraria. Gestiona la bitácora Negra cubana tenía que ser (negracubanateniaqueser.com) desde junio del 2006. En la actualidad desarrolla el Directorio de Afrocubanas (directoriodeafrocubanas.com). Colaboradora de Afroféminas, Pikara Magazine, Global Voices, Hablemos de sexo y amor y Cuba Posible
Nació en La Habana y reside desde 2013 en Hannover, Alemania.


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1 comentario

  • Mar

    Lo peor es que no se dan cuenta del flaco favor que nos hacen a los demás. No puedo ni contar la veces que un blanco ha justificado usar la palabra «moro» (aunque nunca saben si se refieren a musulmanes o a magrebís o a magrabís musulmanes) porque tienen un amigo marroquí que se autodenomina «moro» entre risas (aunque creo más bien que es para hacerse un hueco en la socidad racista en que vive o se la apropia para evitar que le duela).

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